Amanecidos en mi cama...


Tras los cristales espejados del alma colmados de reflejos que te esconden de mis ojos, veré la luz marchitándose a lo lejos cuando mis pupilas ya estén anochecidas. Veré la noche enseñoreándose en mi calle cuando tus sueños amanezcan en mi cama…

Veré la luz de las lejanías y las pupilas de la noche. Y los espejos de estos sueños compartidos amaneciendo perezosos en mi cama...